3PL: ¿qué es y cómo beneficia a las empresas que externalizan su logística?
La logística es una actividad de vital importancia para el éxito de cualquier empresa. No obstante, gestionarla eficientemente puede ser un gran reto para aquellos negocios que no cuentan con los recursos, la infraestructura o el personal adecuado para manejarla.
Una opción cada vez más popular es la externalización de la logística a través de un 3PL. Es decir, un proveedor que se encarga de llevar a cabo las operaciones logísticas para otras empresas. El término 3PL proviene del inglés Third Party Logistics y hace referencia a que el proveedor logístico actúa como intermediario entre los fabricantes o vendedores y los clientes.
La externalización logística implica que la empresa que produce o vende los productos delega las actividades de la cadena de suministro en un 3PL, que se encarga de planificarlas, ejecutarlas y controlarlas. De esta manera, la empresa que decide contratar este servicio, se beneficia de la experiencia, la capacidad y la tecnología del 3PL.
El transporte es uno de los servicios que brinda
Uno de los servicios más importantes que ofrece un 3PL es el transporte de mercancía desde el almacén hasta el cliente final, ya sea por vía terrestre, marítima o aérea. El 3PL se hace responsable de elegir la modalidad, la ruta y el proveedor de transporte más adecuado para cada empresa y envío.
Por otro lado, el 3PL también suele ocuparse de la gestión de todos los documentos, los permisos y los trámites aduaneros que se requieren para el transporte internacional de la mercancía. Además, ofrecen diferentes tipos de transporte en función de las características y las necesidades del cliente.
Entre algunos de los tipos de transporte que puede ofrecer un 3PL se encuentra el de carga completa. Este tipo de traslado se realiza en un vehículo exclusivo, en el cual la mercancía de un solo cliente ocupa todo el espacio o el peso disponible. Asimismo, pueden ofrecer transporte multimodal, donde se combinan diversos modos de transporte para un envío más eficiente y económico.
Almacenamiento y gestión de inventario
El almacenamiento y la gestión de inventario son otros de los servicios que ofrece un 3PL, ya que se encarga de guardar la mercancía de sus clientes dentro de almacenes propios o alquilados, ocupándose de su recepción, clasificación, inventario y control de calidad.
El 3PL también se ocupa de llevar a cabo la gestión de los pedidos de los clientes, desde la preparación de los mismos hasta su envío y su seguimiento. De esta manera, se aseguran que la mercancía pueda llegar a su destino en el tiempo y las condiciones acordadas con anterioridad.
Por otro lado, el 3PL se encarga de planificar, controlar y optimizar el nivel de inventario de la mercancía, a través de la implementación de sistemas de gestión de inventario, que les ayudan a predecir la demanda, calcular el stock adecuado, realizar los pedidos de reposición y mucho más. El 3PL puede aplicar diferentes métodos de gestión de inventario según el tipo de mercancías y las necesidades de la empresa.
Embalaje, etiquetado y acondicionamiento
Además de los servicios de transporte, almacenamiento y gestión de inventario, algunos 3PL proporcionan servicios adicionales que mejoran la calidad, la diferenciación y la satisfacción de la mercancía y el cliente. Por ejemplo, el 3PL puede encargarse del embalaje óptimo de la mercancía, utilizando materiales y diseños que la protejan, reduzcan el espacio y faciliten su transporte y manipulación.
Asimismo, los servicios de un 3PL también es posible que incluyan el etiquetado de la mercancía con la información necesaria, por ejemplo, el código de barras, el número de lote, la fecha de caducidad, el país de origen, entre otros datos que permiten identificar, rastrear y controlar la mercancía, así como también cumplir con las regulaciones necesarias.
Por último, el 3PL puede encargarse de acondicionar la mercancía en función de las condiciones ambientales que requiera la misma, como la temperatura, la humedad, la iluminación, y más, lo que resulta fundamental para la conservación y protección de los productos.